Pide un deseo!!
Estamos llenos de tradiciones y costumbres que sin saber su origen repetimos constantemente y que son tan importantes en los días señalados que se convierten en el centro de la celebración. Hay mil ritos y rituales que conforman nuestra niñez, adolescencia y edad adulta. Podríamos hablar de todos los relacionados con las bodas, la Navidad, las fiestas populares…pero por supuesto, dentro de los paganos, hay uno que es el más repetido, ya que es posible hacerlo desde el primer añito hasta el último de nuestras vidas: «Soplar las velas de la tarta de Cumpleaños». Y ahora bien...¿De donde viene está costumbre?, ¿Qué significa? ¿Os lo habéis preguntado alguna vez? Pues hoy le daremos luz, aparte de la de las velas, a todo esto.
Los primeros datos que se encuentran sobre el rito en cuestión nos lleva nada menos que a la Civilización Egipcia, donde gracias al profundo estudio de los ciclos lunares fueron capaces de calcular los años y donde celebraban el día de nacimiento de niños varones y hombres de la realeza .
En la Antigua Grecia heredan la tradición cobrando más importancia. Los griegos realizan pasteles de harina y miel para celebrar los cumpleaños de los cabeza de familia y ofrecérselos a la Diosa Artemisa, a la que el agasajado podía pedirle un deseo. Soplando las velas colocadas en el dulce, el humo gris resultante ayudaría a que el deseo llegará a su destinataria . La creencia decía que Artemisa sería mas condescendiente con las tartas más elaboradas, de ahí el afán de adornarlas.
El encendido de velas está también estrechamente relacionado con la protección del homenajeado, ya que el fuego fue usado desde nuestros ancestros para mantener alejados a los malos espíritus. Precisamente por este carácter pagano la iglesia cristiana prohíbe esta celebración hasta que en el S XIII los campesinos alemanes la rescatan….Qué casualidades tiene la historia!!